Boca del Río, Ver.- El Secretario del Trabajo y Previsión Social, Javier Lozano Alarcón afirmó aquí que la productividad no está reñida con los derechos de los trabajadores, porque se puede avanzar respetando plenamente el Artículo 123, Constitucional.

Al presidir junto con el Gobernador de Veracruz, Fidel Herrera Beltrán, la instalación de los Consejos Mixtos Locales de Modernización de la Industria Azucarera, el titular de la STPS se refirió a la importancia de encontrar los caminos y fórmulas de crecimiento económico para que este sea sostenido y sustentable.

El Secretario Lozano Alarcón hizo un llamado a los sectores productivos del país para que se sumen al esfuerzo del Gobierno Federal para sentar las bases del diálogo y entendimiento entre los diversos factores de la producción, porque dijo, sólo así se podrán lograr acuerdos que beneficien de manera recíproca tanto a trabajadores como a empresarios.

Ante el Secretario General del Sindicato de Trabajadores de la Industria Azucarera y Similares de la República Mexicana, Adrián Sánchez Vargas y el Presidente de la Cámara Nacional de las Industrias Azucarera y Alcoholera, Juan Cortina Gallardo, el Secretario del Trabajo y Previsión Social destacó que así como es importante consolidar y mantener la modernización en ese sector también lo es el diálogo social.

Javier Lozano se refirió al compromiso asumido por el Sindicato y la Cámara Azucarera en el sentido de aplicar de manera integral programas que han permitido establecer una nueva cultura laboral en el sector y de esta manera superar los retos que enfrenta. Reconoció que hoy esta agroindustria vive una nueva etapa de modernización a partir de la revisión de un contrato ley que no había tenido modificaciones desde 1936.

En este contexto, reconoció la gran responsabilidad que asumen los sectores productivos del país en momentos de prueba y dificultad, y agregó que es imperativo incrementar la productividad de nuestra economía porque son tiempos de multiplicar.

Por último, el Secretario Lozano Alarcón expresó su beneplácito al atestiguar el surgimiento de una nueva etapa en las relaciones laborales de la industria azucarera y dijo que este sector es claro ejemplo de una renovada cultura basada en el respeto. Destacó también el impulso que ha logrado mediante la modernización integral, no obstante el complicado contexto global.