
México
fue ayer electo como miembro titular del Consejo de Administración
de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) para
el período 2008-2011 en el marco de la 97 sesión
de la Conferencia Internacional del Trabajo, que se celebra en
Ginebra del 28 de mayo al 13 de junio de 2008.
El Consejo de Administración es el órgano ejecutivo
de la OIT responsable de las decisiones sobre política
de la Organización, establece el programa y el presupuesto
de la misma y elige al Director General. El Consejo está
formado por 56 miembros titulares (28 miembros gubernamentales,
14 empleadores y 14 trabajadores) y 66 miembros adjuntos (28 gobiernos,
19 empleadores y 19 trabajadores) y sesiona tres veces al año
en Ginebra, sede de la OIT.
La decisión del gobierno de México de participar
en el Consejo de la OIT responde al interés de aportar
su experiencia e influir en el diseño de las políticas
y los programas de este organismo internacional en concordancia
con las prioridades de la política laboral mexicana. De
esta forma, México, como décimo contribuyente de
la Organización, reafirma su voluntad y derecho a intervenir
en la toma de decisiones para la asignación del presupuesto
y velar para que las actividades, programas y experiencia técnica
de la OIT repercutan en beneficio de las instituciones y sectores
de nuestro país.
Al formar parte del Consejo de Administración de la OIT,
el gobierno de México también podrá aportar
ideas y experiencias para el fortalecimiento del papel de la Organización
en diferentes aspectos relacionados con la dimensión social
de la globalización, tales como las normas internacionales
del trabajo, la política social, la protección social
y la salud de los trabajadores, el respeto al principio de libertad
sindical y al derecho de negociación colectiva, la erradicación
de las peores formas de trabajo infantil, la promoción
del empleo y la competitividad, la cohesión social y los
diferentes esquemas de concertación y diálogo entre
los sectores del trabajo a nivel mundial, entre otros.
Los objetivos de la OIT responden plenamente a las prioridades
de México establecidas en el Plan Nacional de Desarrollo
y están vinculados con el cumplimiento de los Objetivos
del Milenio de Naciones Unidas.