Hoy
el Instituto Nacional de Estadística Geografía e
Informática publicó los resultados del cuarto trimestre
de 2007 de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE).
De los resultados al cierre del año pasado, sobresale lo
siguiente:
La Población Económicamente Activa representa el
59.7% de la población que está en edad de trabajar
(14 años y más). Este porcentaje ha sido el máximo
histórico para dicho indicador gracias al elevado ritmo
de incorporación de la población a las actividades
productivas.
En el caso específico de las mujeres, la tasa de participación
alcanzó también un nivel sin precedentes, al presentar
su máximo histórico con el 42.7%, lo cual se explica
por el mayor nivel académico que observa en los años
recientes, así como por la disminución en el número
de hijos, lo que les permite incorporarse mas fácilmente
a un empleo.
Destaca el caso de los trabajadores asalariados que registraron
un aumento anual de 891 mil, de los cuales 756 mil se incorporaron
al Instituto Mexicano del Seguro Social, es decir el 85% de los
nuevos empleos se generaron con seguridad social. Este hecho demuestra
la confianza de los inversionistas tanto nacionales como extranjeros,
y la estabilidad económica prevaleciente.
Esta dinámica de generación de empleos favoreció
la disminución de la Tasa de Desocupación que fue
3.54% de la Población Económicamente Activa, inferior
al 3.60% del mismo periodo de 2006. Esta disminución anual
se presentó por segundo trimestre consecutivo, lo que refleja
una tendencia a la baja en el desempleo nacional.
No obstante los buenos resultados logrados el año pasado,
persisten algunos rezagos estructurales en el ámbito laboral
del país. Este es el caso de incidencia del empleo informal,
el cual se explica principalmente por:
La fuerte presión ejercida por la población inactiva
que buscó incorporarse a la actividad productiva.
La segmentación del mercado laboral en México; si
bien hay un mercado laboral dinámico que está generando
empleos de calidad con la protección social necesaria,
se siguen generando empleos en negocios de pequeña escala
sin seguridad social.
Adicionalmente, al comportamiento de la informalidad contribuyeron
los desastres naturales ocurridos en diversas partes del territorio
nacional, principalmente en el sureste del país.